Corría el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, Presidente de los mexicanos. Hizo muchas reformas a la Constitución General de la República, entre otros al 27 constitucional; propuso y le fue aprobado por los Diputados y Senadores la venta de la tierra ejidal, acción que generó encontradas reacciones por parte del respetable.
Los periodistas de esos tiempos presurosos entrevistaron al Secretario de Agricultura y Recursos Hidráulicos (SARH), Carlos Hank González y le dieron a conocer la preocupación de los mexicanos por la citada reforma. Advertían el regreso a la época de las haciendas, de las tiendas de raya y la respuesta del funcionario de apellido alemán fue tajante, “olvídense, eso no va a suceder, los ricos hacen negocio con el capital especulativo, en inversiones seguras; la agricultura no es negocio, tanto que en todo el mundo los gobiernos la subsidian”. El tiempo le dio la razón: los millonarios no compran tierras ejidales, no se ven por ningún lado las tiendas de raya y los gobiernos siguen subsidiando a quienes hacen producir el campo.
Todo lo anterior se comenta por la triste realidad que viven las familias del agro de este nuestro obradorista México. En el norte del país, productores del Trigo y Maíz exigen mejores precios porque los actuales no pagan ni lo invertido y en estos momentos tienen tomadas instalaciones de Pemex de esos lugares como presión para que el gobierno salga en su apoyo.
Aquí, en este sufrido pero aguantador pedazo de nuestra geografía nacional, miles de campesinos de la zona norte libran una lucha por un mejor precio del sorgo. El año pasado lo vendieron a 7 pesos kilo y ahora se los quieren pagar a 5 pesos con 50 centavos. Con justicia exigen un mejor precio, que por cierto no llega.
La pregunta obligada, ¿qué va a pasar con las familias mexicanas que con el sudor de su frente hacen parir a la Madre Tierra?. La respuesta es simple: si el gobierno no los apoya, los campesinos aztecas no están en condiciones de competir con los precios que impone el libre mercado.
A los agricultores del vecino país, el subsidio del gobierno es altísimo y aquí los subsidios cada año van a la baja.
COTIDIANAS
El partido Movimiento Ciudadano en Nayarit va en pronunciada bajada. Su dirigente estatal, Nacho Flores anda a salto de mata, muy a pesar de alardear que ya sorteó una orden de aprehensión por presunto fraude cuando fue Presidente Municipal de La Yesca. Otro renombrado personaje de MC, José Luis Tovar Alcalde de Ruiz no se para en su municipio, anda también huyendo. Dicen los que saben que los dos viven en Guadalajara, que son protegidos de Enrique Alfaro, Gobernador de Jalisco, emanado de las filas del partido fundado por el veracruzano Dante Delgado. Como sea la cosa, lo cierto es que, aquí el partido Naranja anda patas pa arriba… Y ya que hablamos de partidos políticos, diremos que el Presidente del Comité Directivo Estatal del PAN en Nayarit, Ramón Cambero sigue sin levantar al blanquiazul. De manera penosa anda dando lástimas a lo largo y ancho de este nuestro Nayarit. Aquí aplica el dicho, “en política, cuando hay negocio, ni vergüenza da”… BROCHE POLÍTICO: Una pregunta, “alguien se a acuerda de la Revolución Verde?.