Por: Profesor Jaime Ruiz Quezada
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Dentro de la historia de nuestro futbol amateur en el estado de Nayarit, muy pocos jugadores pueden presumir que fueron dotados de una gran pegada con su pierna izquierda.
Hablamos de Luciano Maldonado, mejor conocido en el argot futbolístico como “el tololoche”, oriundo del barrio del ejido contaba con una pierna izquierda muy educada, que le permitía poner la bolita donde él quería.
Gracias a esta virtud chano fue contratado en los estados unidos para jugar una final de liga a nivel amateur, logró anotar un gol que fue el del campeonato, un gol con el sello de la casa tiro de castigo.
La ciudad de Tijuana también fue testigo de las tremendas balas que salían de la pierna izquierda del oriundo del barrio del ejido, especialmente el equipo rojiblanco donde se convirtió en un verdadero ídolo.
Sus aportaciones permitieron que por primera vez el equipo fuera campeón de liga, fue tanto el amor de los aficionados a chano que al término del partido donde se logró el campeonato, muchos de ellos agradecieron a su ídolo otorgándole dólares como una gratificación a sus actuaciones dentro de la cancha.
Le permitieron ser invitado por otros equipo a participar en diferentes torneos donde compartió cancha con jugadores ex profesionales como Alfredo Morales “harapos”, jugador del Zacatepec en primera división y muchos más que jugaron en el Jalisco.
Durante un tiempo logró formar una dupla con otro Nayarita del barrio del ejido, el famoso “hormiga”, los cuales derrocharon calidad en las diferentes canchas donde siempre fueron reconocidos por su buen trato a la de gajos, pero el terruño llama y chano regresó a tierras nayaritas.
Con el equipo de sus amores a seguir escribiendo su historia ya que su gran amigo el señor Florencio Hernández “el viejo” lo necesitaba a su lado para continuar con las hazañas del club deportivo ejido.
Pero no todo lo que salía de esa pierna izquierda fueron cosas maravillosas, esos trallazos en algún momento se convirtieron en preocupaciones y dolores de cabeza, ya que varios jugadores contrarios al formar la barrera para cubrir el espacio de la portería en tiros de castigo fueron desmayados al ser tocados por algún balonazo por parte de chano.
Incluso varios aficionados o personas que fortuitamente pasaban por la parte de atrás de alguna portería en el momento que el tololoche sacaba una raya fulminante fueron tocados, como la situación del paletero que se encontraba detrás de la portería en la cancha del ejido despachando a un cliente en el justo momento que salió el trallazo y quedó tirado a un lado de su carrito.
O donde chano logró anotar un gran gol en el jicote, pero el resultado fue catastrófico porque justo en ese momento pasó un señor montado en un burro y cayó al suelo por que se encontró con el balonazo.
Luciano, poseedor de un gran carisma, al término del partido disfrutaba la convivencia que se daba con los niños que rodeaban la cancha del ejido ya que sin buscarlo e inconscientemente se convirtió en el ídolo de grandes y chicos.
Normalmente, cuando estaba descansando al término del mismo, disfrutaba de una plática amena donde le daban las gracias por el gol o los goles que logró anotar en el encuentro.
Así como chano Maldonado existen otros futbolistas poseedores de una gran historial, ganado este en aquellos nostálgicos tiempos en que el valor del triunfo era el de la camiseta, falta mucho decir de lo que dentro y fuera de las canchas hizo este ejemplar futbolista apodado por la gente del fútbol de aficionados como “el tololoche”.