Por: Héctor Severiano Ocegueda
Ya es bastante conocido el ASCENSO de partidos y movimientos de DERECHA y EXTREMA DERECHA en TODO el mundo, de lo cual dan cuenta gobiernos como el de Javier MILEI en Argentina, un personaje ESTRAFALARIO que habla con PERROS muertos, con una imagen de Elvis PRESLEY, aplicándose a fondo en su ANARCOCAPITALISMO en la metáfora de la MOTOSIERRA y Nayib BUKELE en El Salvador, que ha recibido incluso la admiración de muchos por sus políticas de PERSECUCIÓN a la DELINCUENCIA, al menos a la denominada Mara Salvatrucha; Benjamín NETANYAHU y su partido LIKUD en Israel, aplicando, con la complicidad de gobiernos “democráticos”, métodos NAZIS de exterminio contra la población PALESTINA; Donald TRUMP, con toda su RETÓRICA basada en palabrería sobre la recuperación del liderazgo de Estados Unidos, como HITLER lo había hecho en los años 20 y 30 en Alemania, expresión diáfana del DECLIVE de Estados Unidos; el recientemente caso de otro NEONAZI Jair BOLSONARO, en cuya segunda oportunidad pese a la derrota reciente por LULA en Brasil, obtuvo una altísima votación.
A pesar de que los casos están ahí, a la mano, para hacer de ellos motivo de estudio CUIDADOSO en Morena y aliados de “izquierda” parece NO acusarles recibo, confirmando aquello de que NO hay peor CIEGO que el que NO quiere VER. El propio presidente AMLO, con grandes aciertos, reconocidos su sorprendente capacidad de TRABAJO y liga con el PUEBLO, apostó por DINAMITAR a las ORGANIZACIONES sociales, SINDICALES y CAMPESINAS independientes argumentando que estos son organismos dirigidos por CORRUPTOS y se negó sistemáticamente a impulsar una política estructurada de MEDIOS que permitieran construir un aparato MEDIÁTICO propio con RADIO, TELEVISIÓN y MEDIOS escritos, contradiciendo incluso el viejo lema LIBERAL del siglo XIX de que la “PRENSA, se combate con la PRENSA” el cual constantemente repite.
Por razones de la naturaleza breve de textos como este, dejo para más adelante los argumentos detallados y voy al caso de la ELECCIÓN de 2024, en el cual la ALTA BUROCRACIA de Morena, desde Mario DELGADO hasta gobernantes que intervinieron en la selección de CANDIDATURAS parece que NI VEN, NI ESCUCHAN lo que sucede en el mundo y EMBELESADOS en su propia necesidad de IMPONERSE, apostaron por recurrir a los MÉTODOS, USOS y COSTUMBRES del Viejo Sistema Político PRIISTA- PANISTA, echando andar un PODEROSO movimiento que no es suficientemente VISIBLE pero SÍ tendrá efectos ELECTORALES y más allá, contribuirá con formidable ÍMPETU a la DESCOMPOSICIÓN de Morena y me refiero a este partido porque es el EJE y principal expresión política en virtud de la casi INTRASCEDENCIA de los “ALIADOS”.
El gobierno FEDERAL proclamó la Cuarta Transformación y basó el APOYO SOCIAL en los PROGRAMAS SOCIALES, la construcción grandes obras de infraestructura de importancia ESTRATÉGICA para el desarrollo nacional y con el combate a la CORRUPCIÓN, identificada por el presidente AMLO como “el principal problema de México” promovió vigorosamente su presencia. Pero eso NO fue replicado en el ámbito LOCAL, donde gobiernos estatales y municipales prácticamente se EMPATANARON, excepciones honrosas, en la REPETICIÓN del Viejo Sistema Político, que es ahora mismo uno de los ESLABONES DÉBILES de la CONTINUIDAD de la Cuarta Transformación. Es muy conocida la alianza política de los VIEJOS GRUPOS del PRIISMO y el PANISMO locales en gobiernos estatales y municipales de Morena y ello, más allá de si gustó o NO, ha significado en los hechos la RÉPLICA del sistema político ODIOSO contra el cual VOTAMOS mayoritariamente en 2018.
Si en las ALTAS BUROCRACIAS y GOBIERNOS de la Cuarta Transformación SUPONEN que semejante comportamiento está a SALVO de la RESTAURACIÓN del viejo régimen abonándole incluso el camino a la COALICIÓN DERECHA-ULTRADERECHA, podrían estar en un GRAVE ERROR.