Se estima que la noche de mañana martes o la madrugada de un día después la tormenta tropical “lidia”, pero ya convertida en Huracán categoría 1 o 2, impactará en el municipio de Santiago, Ixcuintla.
Los gobiernos de los tres niveles están tomando las medidas necesarias para evitar mayores desgracias de las zonas que resulten afectadas, ya sea por los fuertes vientos o los desbordamientos de ríos y arroyos que causan inundaciones de zonas habitadas o parcelas de cultivo.
Ya se suspendieron las clases de los niveles básicos, tanto del sistema educativo público como privado, al mismo tiempo que se instalan albergues para recibir a familias que pudieran ser evacuadas para protegerlas del fenómeno natural.
Igualmente, las campañas de información se vienen dando por todos los medios y todo con el noble propósito de evitar mayores desgracias a las familias que en breves horas sufrirán los embates de la desbordada naturaleza. Así pues, no queda de otra más que tomar las medidas necesarias para librar un nuevo huracán.
NO ACABAN LAS GUERRAS
Cuando la guerra entre Rusia y Ucrania todavía sigue, ahora estalla un nuevo enfrentamiento entre Israel y Hamás, grupo guerrillero que se dice invadido por el pueblo de Israel.
De momento se cuentan cerca de dos mil muertos de ambos bandos, pero se tiene la certeza que esta guerra añeja rodeada de fanatismos religiosos será larga, caótica y sangrienta, a tal grado que podría cambiar el escenario territorial de la llamada “tierra santa”.
Seguramente que los cohetes, bombas y amenazas no quedarán solamente entre israelíes y el grupo terrorista sino que se extenderá hacía otros países, y de entrada el vecino país del norte, los Estados Unidos, ya mandó armas y portaviones a la zona del conflicto, mientras que el gobierno de Irán seguirá financiando los ataques terroristas.
Lo que viene será peor de lo imaginado. La guerra será cruenta, trágica. El pueblo de Israel no va a permitir que Irán a través de un grupo terrorista lo ponga de rodillas. Y de eso, todos seremos testigos.
COTIDIANAS
DINERO MANDA. Los dueños del capital y los medios de producción, es decir, los adinerados y machuchones seguirán con más de lo mismo: estar con los ganadores. Los ricos del país cuando les convenía apoyaban al PRI; los vientos cambiaron y se fueron con el PAN. Ahora están con Morena. Están convencidos que el dinero no tiene ideología ni patria… AQUÍ TAMBIÉN. Lo último se confirma con los ricos de este pedazo de la geografía nacional. Aquí, hace apenas unos días, el hombre rico de Nayarit y dueño de medio Tepic, Antonio Echevarría Domínguez, declaró su apoyo y voto a favor de Xóchitl Gálvez. Eso dijo, pero un centavo no gasta para la campaña de Xóchitl. Así son los pudientes: el dinero está por encima de la política y sus emociones… BROCHE POLÍTICO: Cuando el fanatismo religioso se atraviesa, las guerras son más crueles y sangrientas.
