Por: Miguel Manzo
Anoche, el hijo del alcalde de Santiago Ixcuintla, Sergio González “el Pipiripao”, chocó completamente borracho contra un poste de luz en Boca de Camichín, dejando a todo el poblado sin energía eléctrica en plena ola de calor.
El vehículo, una camioneta con placas PA-0266-A, terminó destrozando la infraestructura eléctrica. El resultado: temperaturas de casi 40 grados sin ventiladores, sin refrigeración, sin nada. Restaurantes, congeladoras de mariscos y negocios locales perdieron miles de pesos en mercancía echada a perder, mientras el responsable no pasó ni una noche detenido.
¿Lo peor? Tránsito municipal borró todo rastro del accidente. No hay parte oficial, no hay reparación de daños, no hay justicia. La orden fue clara: proteger al apellido González, aunque el pueblo pague las consecuencias.
En Santiago Ixcuintla, el que choca borracho y tiene el poder, se va limpio. El que trabaja y pierde, se aguanta en silencio.
